Sesión de seguridad infantil en medios acuáticos
El medio acuático, zona de riesgo para los más pequeños
Orvalle organiza una charla para concienciar de los peligros y enseñar a actuar en caso de accidentes por ahogamiento
El ahogamiento es una de las principales causas de mortalidad infantil, principalmente entre niños de 0 a 4 años, y el 60 por ciento de los menores que sobreviven a un accidente de este tipo sufre graves secuelas. La concienciación de los padres ante este tipo de peligros, acrecentado durante los meses veraniegos, así como unas recomendaciones básicas para actuar en una situación de emergencia, fue el objetivo de la sesión sobre “Seguridad infantil en el medio acuático”.
La responsable de la Escuela de Natación de Orvalle, María Ferrer, en la parte teórica, y voluntarios de la Cruz Roja, para la realización de prácticas de reanimación cardio-pulmonar, fueron los encargados de trasladar a los padres asistentes la importancia de conocer los riesgos, cómo prevenirlos y las pautas de actuación en caso de accidente en el medio acuático.
La sesión se dividió en cuatro partes. En primer lugar, se trató de concienciar a los padres de los peligros que se derivan del medio acuático, principalmente en piscinas. Del millón de recintos de baño que existen en España, el 86% son de carácter privado, y en muchos de ellos no hay socorrista, según explicó María Ferrer, que insistió en la conveniencia de fomentar en los niños el desarrollo psicomotor, para que alcancen autonomía de movimientos en el agua. Esta es la razón de ser de la Escuela de Natación de Orvalle, que busca que los niños desarrollen desde muy pequeños estas capacidades: “Les enseñamos técnicas de rotación del cuerpo, para que el niño pueda respirar y llamar la atención de los padres. Incluso practicamos con ropa de calle, para que los niños también aprendan a desenvolverse con ese peso adicional.”
{oziogallery 279} |
En cuanto a prevención, Ferrer recomendó la mayor atención de los adultos hacia los pequeños, tanto en la playa, como en piscinas e incluso en una bañera doméstica. Cinco centímetros de profundidad de agua son suficientes para provocar el ahogamiento de un niño. En cuanto a piscinas, la recomendación básica es tener vallado el recinto, además de tener un teléfono móvil para una rápida llamada a servicios de emergencia. Unos minutos pueden ser vitales en un accidente de este tipo. Finalmente, recomendó a los padres aprender las técnicas de reanimación.
En esta parte de la charla intervinieron los voluntarios de Cruz Roja, que ofrecieron todo tipo de explicaciones y demostraciones prácticas de la reanimación cardio-pulmonar, así como otras pautas de actuación.
La Escuela de Natación es una de las actividades extraescolares que el Colegio Orvalle ofrece a los padres de sus alumnas y alumnos, especialmente a los de Educación Infantil.